El alcance de la innovación tecnológica sigue creciendo, cambiando todas las industrias a medida que evoluciona. En la sanidad, la tecnología desempeña un papel cada vez más importante en casi todos los procesos, desde el registro de los pacientes hasta el control de los datos, pasando por las pruebas de laboratorio y las herramientas de autocuidado.
Dispositivos como los teléfonos inteligentes y las tabletas están empezando a sustituir a los sistemas convencionales de monitorización y registro, y las personas tienen ahora la opción de someterse a una consulta completa en la intimidad de sus hogares. Los avances tecnológicos en la sanidad han contribuido a que los servicios salgan de los confines de las paredes de los hospitales y se integren con dispositivos fáciles de usar y accesibles.
Los siguientes son diez avances tecnológicos en la sanidad que han surgido en los últimos diez años.
1. La historia clínica electrónica. En 2009, sólo el 16 por ciento de los hospitales de Estados Unidos utilizaban una HCE. En 2013, cerca del 80 por ciento de los hospitales elegibles para el programa de incentivos de uso significativo de los CMS habían incorporado una HCE en sus organizaciones. «Durante mucho tiempo hemos tenido sistemas tan dispares, es decir, tenías un sistema que hacía la farmacia, otro que hacía las órdenes, otro que hacía la documentación», dice Jeff Sturman, socio de Cumberland Consulting Group, con sede en Franklin, Tennessee. «La integración de estos sistemas en una única plataforma, o al menos en una plataforma más estructurada, ha permitido una atención más integrada y eficiente para los pacientes», afirma.
Si bien la HCE ya ha creado grandes avances en la centralización y eficiencia de la información de los pacientes, también puede utilizarse como una herramienta de datos y salud poblacional para el futuro. «En los próximos años se va a producir un gran cambio cultural de la medicina impulsada por los datos», afirma Waco Hoover, director general del Instituto para la Transformación de la Tecnología Sanitaria de Nueva York. «Históricamente, no ha sido una parte importante de cómo se practica la medicina. Los médicos van a la facultad de medicina y a las residencias, pero cada organización tiene su propia forma de hacer las cosas. Esa es una de las razones por las que vemos una atención variada en todo el país. Cuando los datos sean la base para tomar decisiones, esto cambiará y mejorará los resultados de la consistencia de la medicina que se ofrece».
2. mHealth. La salud móvil está liberando a los dispositivos sanitarios de cables y cuerdas y permitiendo a médicos y pacientes por igual comprobar los procesos sanitarios sobre la marcha. Un informe de R&R Market Research estima que el mercado mundial de la mHealth alcanzará los 20.700 millones de dólares en 2019, lo que indica que no hace más que crecer y generalizarse. Los teléfonos inteligentes y las tabletas permiten a los proveedores de servicios sanitarios acceder y enviar información con mayor libertad. Los médicos y los proveedores de servicios pueden utilizar las herramientas de mHealth para las órdenes, la documentación y simplemente para llegar a más información cuando están con los pacientes, dice el Sr. Sturman.
Sin embargo, la mHealth no es sólo la conectividad inalámbrica. También se ha convertido en una herramienta que permite a los pacientes convertirse en protagonistas activos de su tratamiento al conectar la comunicación con la biometría, dice Gopal Chopra, MD, director general de PINGMD, y profesor asociado de la Escuela de Negocios Fuqua de la Universidad de Duke en Durham, N.C. «Ahora puedo hacer que mi báscula de baño sea inalámbrica. Puedo hacer que mi tensiómetro sea inalámbrico. Puedo tomar un electrocardiograma y ponerlo en mi smartphone y transferirlo de forma inalámbrica», afirma. «La mHealth tiene la oportunidad de sacar la monitorización de la atención sanitaria de la oficina, del laboratorio y, básicamente, de formar parte de tu vida».
3. Telemedicina/telesalud. Los estudios demuestran sistemáticamente el beneficio de la telesalud, especialmente en entornos rurales que no tienen acceso a los mismos recursos que pueden tener las áreas metropolitanas. Un estudio a gran escala publicado en CHEST Journal muestra que los pacientes de una unidad de cuidados intensivos equipada con servicios de telesalud fueron dados de alta de la UCI un 20 por ciento más rápido y tuvieron una tasa de mortalidad un 26 por ciento menor que los pacientes de una UCI normal. Adam Higman, vicepresidente de Soyring Consulting en San Petersburgo (Florida), afirma que, aunque la telemedicina no es necesariamente una novedad, se trata de un campo en crecimiento y su ámbito de posibilidades se está ampliando.
Tampoco se pueden ignorar las ventajas económicas de la telesalud, dice el Sr. Hoover. Por ejemplo, la aseguradora sanitaria WellPoint, con sede en Indianápolis, puso en marcha en febrero de 2013 un programa de videoconsulta en el que los pacientes pueden recibir una evaluación completa a través de un videochat con un médico. Las reclamaciones se generan automáticamente, pero los honorarios se reducen para tener en cuenta los costes tradicionales de la consulta. Dejando a un lado el coste real de la atención sanitaria, el Sr. Hoover afirma que estas clínicas de telemedicina también reducirán los costes de tiempo fuera de la consulta para los empleados y los empleadores al eliminar la necesidad de dejar el trabajo para ir a una consulta de atención primaria.
4. Tecnología de portal. Los pacientes se están convirtiendo cada vez más en actores activos de su propia atención sanitaria, y la tecnología de portales es una herramienta que les ayuda a hacerlo. La tecnología de portales permite a los médicos y a los pacientes acceder a los historiales médicos e interactuar en línea. El Sr. Sturman afirma que este tipo de tecnología permite a los pacientes participar más estrechamente y estar mejor informados sobre su atención. Además de aumentar el acceso y la disponibilidad de la información médica, el Sr. Hoover añade que la tecnología de los portales puede ser una fuente de autonomía y responsabilidad para los pacientes. «Es poderosa porque un paciente puede ser un aliado extraordinario en su atención. Pueden detectar errores», dice. «Empodera al paciente y le añade un grado de poder en la atención en el que puede convertirse en un participante activo.»
5. Quioscos de autoservicio. De forma similar a la tecnología de portales, los quioscos de autoservicio pueden ayudar a agilizar procesos como el registro en el hospital. «Los pacientes pueden hacer cada vez más todo lo relacionado con el registro sin tener que hablar con nadie», dice el Sr. Higman. «Esto puede ayudar a ahorrar personal, y algunos pacientes se sienten más cómodos con ello». Los quioscos automatizados pueden ayudar a los pacientes a pagar los copagos, comprobar la identificación, firmar el papeleo y otros requisitos de registro. El Sr. Higman afirma que también existen variantes de tabletas que permiten utilizar la misma tecnología en entornos ambulatorios y de cabecera. Sin embargo, los hospitales deben ser cautelosos a la hora de integrarla para garantizar que no se elimine por completo la comunicación entre personas. «Si una persona quiere hablar con una persona, debe poder hablar con una persona», dice.
6. Herramientas de monitorización remota. A finales de 2012, 2,8 millones de pacientes en todo el mundo utilizaban un sistema de monitorización a domicilio, según un informe de Research and Markets. Monitorizar la salud de los pacientes en casa puede reducir los costes y las visitas innecesarias a la consulta del médico. El Sr. Higman ofrece el ejemplo de un yeso cardíaco con un marcapasos que transmite automáticamente los datos a un centro remoto. «Si algo va mal en un paciente, se puede contactar con él», dice. «Básicamente, es permitir que otras personas controlen su salud por usted. Puede parecer invasivo, pero es estupendo para los pacientes con enfermedades graves y crónicas».
Un artículo de Kaiser Health News, National Public Radio y Minnesota Public Radio analizó los efectos que un sistema de monitorización a domicilio tuvo sobre las tasas de readmisión de los pacientes con enfermedades cardíacas en Essentia Health, con sede en Duluth (Minnesota). La tasa media nacional de reingresos de pacientes con enfermedades cardíacas es del 25 por ciento, pero después de que Essentia Health implantara un sistema de monitorización a domicilio, las tasas de reingreso de sus pacientes con enfermedades cardíacas se redujeron a tan sólo un dos por ciento. Y ahora que los hospitales están siendo penalizados económicamente por los reingresos, los sistemas de monitorización a domicilio pueden ofrecer una solución para evitar esas penalizaciones.
7. Sensores y tecnología wearable. El mercado de dispositivos médicos vestibles está creciendo a una tasa de crecimiento anual compuesta del 16,4% al año, según un informe de Transparency Market Research. Los dispositivos médicos vestibles y los sensores no son más que otra forma de recopilar datos, que según el Dr. Chopra es uno de los objetivos y propósitos de la asistencia sanitaria. Dice que los sensores y la tecnología portátil pueden ser tan sencillos como una alerta enviada a un profesional sanitario cuando un paciente se cae o un vendaje que pueda detectar los niveles de pH de la piel para saber si un corte se está infectando. «Cualquier cosa que utilicemos actualmente donde pueda haber un sensor inteligente forma parte de esa solución», dice el Dr. Chopra. «Somos capaces de tomar muchos de estos puntos de datos para ver si está ocurriendo algo anormal».
8. Comunicación inalámbrica. Aunque la mensajería instantánea y los walkie-talkies no son tecnologías nuevas en sí mismas, sólo se han introducido recientemente en el ámbito hospitalario, sustituyendo a dispositivos como los bípers y los localizadores aéreos. «Los hospitales se están poniendo al día en el siglo XXI en lo que respecta a la comunicación entre el personal», afirma el Sr. Higman, quien añade que los avances en materia de comunicación interna en los hospitales han seguido un calendario de desarrollo más lento, ya que han tenido que tener en cuenta las cuestiones de seguridad y de la HIPAA.
Sistemas como Vocera Messaging ofrecen plataformas para que los usuarios se envíen mensajes seguros, como pruebas de laboratorio y alertas, mediante teléfonos inteligentes, consolas basadas en la web o sistemas clínicos de terceros. Estos sistemas de mensajería pueden agilizar el proceso de comunicación sin dejar de rastrear y registrar la información enviada y recibida de forma segura.
9. Servicios de localización en tiempo real. Otra herramienta de seguimiento de datos en auge, los servicios de localización en tiempo real, están ayudando a los hospitales a centrarse en la eficiencia e identificar al instante las áreas problemáticas. Los hospitales pueden implantar sistemas de seguimiento de instrumentos, dispositivos e incluso del personal clínico. El Sr. Higman afirma que estos servicios reúnen datos sobre áreas y departamentos que antes eran difíciles de rastrear. «El análisis retrospectivo sólo puede llegar hasta cierto punto, sobre todo en lugares que cambian constantemente como los departamentos de urgencias», dice, pero el seguimiento de los movimientos con un servicio de localización en tiempo real puede poner de manifiesto posibles problemas de eficiencia y utilización.
Estas herramientas también permiten flexibilidad para los cambios de última hora. «Si un caso de adición hoy, ¿tienen instrumentos a mano, y dónde están ?», pregunta. En el nivel más básico, estos servicios pueden garantizar que los equipos y suministros no salgan del edificio, y en el caso de los equipos y suministros de alto coste de los que los hospitales pueden tener sólo uno o unos pocos, poder rastrear su ubicación puede ayudar a verificar su utilización, dice.
10. Farmacogenómica/secuenciación del genoma. La medicina personalizada sigue acercándose a la vanguardia de la industria sanitaria. Adaptar los planes de tratamiento a los individuos y anticipar la aparición de ciertas enfermedades ofrece beneficios prometedores para la eficiencia de la asistencia sanitaria y la precisión del diagnóstico. La farmacogenómica, en particular, podría ayudar a reducir los miles de millones de dólares de gasto sanitario excesivo debido a los efectos adversos de los medicamentos, los diagnósticos erróneos, los reingresos y otros costes innecesarios.
Antes de que un sistema completo de farmacogenómica llegue a buen puerto, el sector sanitario necesita una herramienta que pueda agregar y analizar todos los big data y la información sanitaria digital, afirma el Sr. Hoover. «Cuando empecemos a tener realmente la capacidad de estudiar muchos de esos datos, se va a transferir la forma de cotejar esa información a nivel poblacional, individual y macro», dice. «La capacidad de comparar realmente esa información va a ser valiosa a medida que avancemos, asegurándonos de que los medicamentos que estamos tomando van a funcionar para nosotros.»
Las herramientas para el análisis de big data para la farmacogenómica todavía se están desarrollando, pero el análisis de datos y la agregación de datos con el propósito de la salud de la población puede ser el próximo gran avance en el horizonte. «Entender y conectar todas estas variables va a ser profundo en lo que se refiere a avanzar en la atención sanitaria y diseñar intervenciones y analizar poblaciones de pacientes y, en última instancia, mejorar la vida y la salud de la población estadounidense», afirma Mr. Hoover.
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