Biografía de Walter Cronkite

Años en la CBS

En 1950 Cronkite se unió a CBS News. Hasta ese momento era un gran desconocido para el público en general. Dos años más tarde fue narrador de You Are There, un programa de televisión en el que se recreaban grandes acontecimientos históricos como si fueran noticias de actualidad. En 1954 se convirtió en narrador de The Twentieth Century, un destacado documental televisivo que relataba los acontecimientos de la historia reciente. Este trabajo le dio a Cronkite el reconocimiento del público televidente.

A partir de 1952, Cronkite también fue el presentador de la cobertura de la CBS de las convenciones presidenciales nacionales demócrata y republicana. Con la excepción de la convención demócrata de 1964, continuó con este papel hasta su jubilación en 1981.

Cronkite asumió las funciones de presentador y editor del CBS Evening News en 1962. En ese momento, el Informe Huntley-Brinkley de la National Broadcasting Company (NBC), presentado por Chet Huntley y David Brinkley, lideraba los índices de audiencia. Poco a poco, las emisiones de la CBS fueron ganando terreno al equipo de la NBC, que se disolvió en 1970. Desde entonces y hasta su jubilación, el programa de Cronkite fue sistemáticamente el noticiero televisivo más popular.

Aunque las noticias de la noche eran la principal responsabilidad de Cronkite, mantuvo su protagonismo como narrador y corresponsal en los especiales de la cadena. Entre ellos,

Walter Cronkite. Reproducido con permiso de AP/Wide World Photos.

Walter Cronkite.
Reproducido con permiso de

AP/Wide World Photos

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tomas espaciales, grandes documentales y entrevistas con figuras mundiales como los presidentes Harry Truman (1884-1972), Dwight Eisenhower (1890-1969) y Lyndon Johnson (1908-1973). Tras su jubilación, continuó con esta función, además de la serie periódica El universo de Walter Cronkite.

Para una sociedad que enfatizaba la juventud, fue una paradoja (contradicción) que la reputación de Cronkite aumentara a medida que envejecía. Su pelo blanco y su bigote le daban un aspecto distinguido. Sin embargo, la reputación de Cronkite no se basaba en la apariencia. Se ganó el reconocimiento y las alabanzas gracias al trabajo duro, la pasión por la precisión y la insistencia en la imparcialidad (ser neutral). Subyacía un espíritu competitivo de toda la vida, que se moderaba ante el micrófono y la cámara, pero que salía a relucir en sus actividades de ocio, como la navegación, el tenis y la conducción de coches de carreras.

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