Antes de hidratar, prepara tus cutículas. Dúchate o sumerge tus dedos en agua tibia durante 10 o 15 minutos para asegurarte de que las cutículas están suaves y flexibles. A continuación, comprueba si tus cutículas se ven sobredimensionadas o gruesas. Si es así, empújalas suavemente – pero nunca utilices una herramienta de metal para hacerlo.
Una vez que tus cutículas estén preparadas, es el momento de hidratarlas. Sin embargo, no busques tu loción corporal o de manos habitual. Estos productos no estarán a la altura. La piel de la cutícula es mucho más delicada y requiere un producto diseñado para proporcionar una gran hidratación con un toque suave.
Advertencia
Si tus cutículas están secas pero no se han despegado de la uña, compra alguna crema para cutículas. Busca las que tengan ácidos cítricos, que son hidratantes más eficaces. Debes elegir cremas hidratantes que contengan petróleo, glicerina, manteca de karité o aceite de semilla de cártamo. Estos humectantes naturales hacen maravillas para tus cutículas así como para tus manos.
Para las cutículas desprendidas, el aceite para cutículas puede ser la mejor opción. Los aceites para cutículas suelen estar hechos de una combinación de aceites vegetales enriquecidos, aceite de linaza o ácidos cítricos. El aceite proporciona una hidratación intensa, permitiendo que la cutícula se repare y se vuelva a unir a la uña. Sin embargo, deben usarse con moderación, ya que las cutículas podrían acostumbrarse a una hidratación tan profunda, haciendo casi imposible usar otra cosa en el futuro.
Para las cutículas agrietadas, prueba un tratamiento más intensivo con aceite de vitamina E, que puedes encontrar en la mayoría de las farmacias . La manteca de karité también hace maravillas con las cutículas agrietadas. Puedes encontrar este ingrediente común en cremas de manos y mantecas corporales en cualquier tienda de alimentos saludables. Si no tienes tiempo para ir a las tiendas de belleza o de alimentos saludables, echa un poco de aceite de almendras o de oliva en el carrito mientras haces la compra. Solo tienes que frotarlo en las cutículas como cualquier otro aceite para cutículas para obtener los mismos resultados.
Solo recuerda ser paciente mientras renuevas tus cutículas. Puede tardar varios días en ver los resultados – pero los beneficios serán duraderos.
Querrás mantener las puntas de tus dedos recién hidratadas con el mejor aspecto. Sigue leyendo para saber cómo los sabrosos ingredientes de tu cocina pueden cocinar una receta para unas cutículas saludables.
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