Como padre, pasas años apoyando a tus hijos para que crezcan y tengan éxito. Cuando finalmente llega el día en que se van de casa, su corazón se hinchará de orgullo. Sin embargo, también puede sentir pérdida y confusión. Si es así, no está solo. Al igual que muchos padres antes que tú, puedes estar experimentando el síndrome del nido vacío.
Pero, ¿cómo reconocer el síndrome del nido vacío en ti mismo o en tu pareja? Y ¿qué se puede hacer para afrontar el síndrome del nido vacío? Siga leyendo para descubrirlo.
¿Cuáles son los signos del síndrome del nido vacío?
Cuando se crían los hijos, los padres suelen dejar de lado sus objetivos e intereses personales para centrarse en la familia. Los niños se convierten en el centro de sus vidas. Una vez que los hijos son independientes, los padres pueden sentirse sin dirección y solos.
Otros síntomas del síndrome del nido vacío pueden ser:
- Ansiedad o pánico
- Altos niveles de estrés
- Pérdida de interés en actividades que antes disfrutaban
- Sentir falta de propósito
- Sentimientos de rechazo
- Dolor extremo
- Depresión
- Madres
- Padres solteros
- Personas en matrimonios infelices o disfuncionales matrimonios infelices o disfuncionales
- Sentir una pérdida de control sobre la vida de los hijos (especialmente en el caso de los padres)
- Falta de una red de apoyo social
- Tener uno o pocos hijos
- Ser más joven cuando los hijos nacieron
- Preocuparse por la seguridad y el bienestar del niño en el mundo exterior
- iv id=»eab0bd8478bienestar en el mundo exterior
¿A quién afecta el síndrome del nido vacío?
El síndrome del nido vacío puede afectar a cualquier padre, ya sea biológico o adoptivo, soltero o casado, hombre o mujer. Sin embargo, un estudio realizado en 2009 en Canadá descubrió que algunos grupos tienen mayor riesgo de padecer el síndrome del nido vacío:
Las madres tienen más probabilidades de verse afectadas que los padres porque a menudo se espera que las mujeres sean las principales cuidadoras de los niños. Las madres también son más propensas a tener su identidad envuelta en ser padres.
Además, el estudio canadiense encontró factores de riesgo adicionales para todos los padres:
¿Cuáles son los efectos del síndrome del nido vacío?
La Clínica Mayo subraya que el síndrome del nido vacío no es un diagnóstico clínico. Sin embargo, los investigadores y los médicos reconocen que el síndrome del nido vacío puede afectar realmente a algunos padres y tutores. Para algunos padres, el dolor es tan profundo como el que se experimenta tras una muerte. Este dolor extremo puede derivar en depresión, crisis de identidad, conflictos matrimoniales y alcoholismo, señala la Clínica Mayo.
Sin embargo, no todos los efectos del nido vacío son malos. De hecho, algunos pueden ser positivos. La Asociación Americana de Psicología sugiere que un nido vacío puede promover la autonomía, la libertad y la mejora de las relaciones de los padres y cuidadores. Una vez que los niños están fuera de casa, los nidos vacíos pueden reavivar intereses y perseguir objetivos personales que pueden haber dejado de lado.
Además, sin la presencia de sus hijos, las parejas pueden volver a conectar pasando más tiempo íntimo y de calidad juntos. Tener el nido vacío también puede impulsar a los padres a reconectar con amigos y compañeros.
¿Cómo más se puede afrontar el síndrome del nido vacío? ¿Cuánto tiempo dura? Sigue leyendo para conocer esas respuestas.