Las infecciones bacterianas de las vías respiratorias superiores son frecuentes. Algunas de estas infecciones están causadas por bacterias anaerobias y Staphylococcus aureus y pueden constituir considerables problemas terapéuticos. La otitis media supurativa crónica puede dar lugar a veces a una osteítis grave de las estructuras óseas circundantes, a una trombosis del seno sigmoide y a abscesos intracraneales. Los microorganismos causantes son en su mayoría anaerobios. Muchas infecciones de los senos paranasales también se deben a bacterias anaerobias. Estas infecciones pueden causar rápidamente un daño irreversible de la mucosa de los senos paranasales y, en última instancia, extenderse a nivel intracraneal. La parotitis purulenta se observa sobre todo en pacientes ancianos y gravemente enfermos. En la mayoría de los casos, los cultivos bacterianos revelan la presencia de S. aureus productor de betalactamasas. Las infecciones de los dientes de la mandíbula a veces se extienden al suelo de la boca y pueden llegar hasta la garganta y el mediastino. Si no se tratan adecuadamente, estas infecciones anaerobias resultan mortales. La osteomielitis crónica de la mandíbula es cada vez más frecuente y constituye un grave problema terapéutico. Muchos pacientes no pueden ser protegidos contra recaídas dolorosas e incapacitantes. Las bacterias anaerobias, procedentes de la flora orofaríngea normal, desempeñan un papel importante en la patogénesis de este trastorno. Las infecciones y abscesos retrofaríngeos, parafaríngeos y periamigdalinos están causados en su mayoría por anaerobios y exigen un tratamiento quirúrgico y antibacteriano adecuado. En los tumores malignos de oído, nariz o garganta, las infecciones anaerobias suelen deteriorar las condiciones, ya que el edema inflamatorio aumenta el volumen del tumor y el dolor de los pacientes. Las infecciones cutáneas de la cara y los pabellones auriculares causadas por S. aureus pueden constituir un problema terapéutico. (RESUMEN TRUNCADO A 250 PALABRAS)