¿Cuántos amperios consume un frigorífico?

La planificación de los circuitos de la cocina es un paso fundamental a la hora de diseñar una nueva casa, ya que los fogones, los frigoríficos, los microondas, las tostadoras y las cafeteras consumen grandes cantidades de electricidad. En las casas más antiguas, construidas antes de la introducción de los avanzados electrodomésticos actuales, un solo circuito solía ser suficiente para atender todas las necesidades eléctricas de la cocina. Pero cuando se utilizan varios aparatos de cocina modernos a la vez, el disyuntor puede saltar. Una forma de eliminar ese riesgo es establecer un circuito separado para el frigorífico.

Tener el frigorífico en un circuito dedicado es recomendable para su mejor rendimiento y para evitar la sobrecarga de los circuitos de cableado de la casa.

La mayoría de los frigoríficos domésticos consumen entre 500 y 750 vatios de potencia durante su funcionamiento rutinario. Con una corriente de 110 voltios, un aparato de 750 vatios necesitará 6,8 amperios para funcionar. La fórmula para convertir los vatios en amperios es vatios divididos por voltios = amperios. Un frigorífico utilizará aproximadamente la mitad del amperaje disponible de un circuito estándar de 15 amperios, y más de un tercio de un circuito de 20 amperios.

Recuerde un margen de seguridad del 20-30%. Un circuito sólo debería soportar el 80% de su carga nominal durante el funcionamiento normal. Un circuito de 15 amperios en estas circunstancias tendría una capacidad de carga real de 12 amperios. Con una carga de 6,8 amperios en el circuito, la capacidad de reserva de trabajo recomendada sería de sólo 5,2 amperios. Aumentar la capacidad a 20 amperios dará un mayor margen de seguridad, pero aún así, tenga cuidado. La capacidad sobrante de un circuito de 15 amperios probablemente no soportaría un microondas o una tostadora en este circuito mientras el compresor del frigorífico está funcionando y provocaría un disyuntor disparado.

Un argumento adicional a favor de un circuito separado para los frigoríficos es el riesgo de que se produzca un apagón inadvertido. En una situación de sobrecarga, el disyuntor cortará la alimentación del circuito. Cuando esto sucede, el disyuntor debe ser restablecido manualmente para restaurar la energía. Esto no supondrá un problema importante si el corte de energía sólo dura unos minutos. Sin embargo, si el corte se produce mientras el propietario de la vivienda está fuera durante un largo periodo de tiempo, los alimentos del frigorífico y del congelador pueden calentarse y estropearse.

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