Cuidado de día para adultos: Lo que los cuidadores familiares deben saber

Si bien Medicare generalmente no cubre los honorarios, la asistencia financiera puede ser posible a través de otros programas gubernamentales, como Medicaid, la Administración de Salud de los Veteranos y las agencias estatales. Eso significa que la atención diurna para adultos puede ser una opción más asequible para los cuidadores que buscan ayuda y respiro que la contratación de un trabajador para proporcionar atención en el hogar.

Cuándo considerar el cuidado diurno de adultos

La Asociación Nacional de Servicios Diurnos para Adultos sugiere a los cuidadores que busquen el cuidado diurno cuando empiecen a ver signos de que un ser querido mayor:

– Es incapaz de estructurar sus propias actividades diarias

– Se siente aislado y solo y desea la interacción con otras personas mayores

– Experimenta ansiedad o depresión y necesita apoyo social y emocional

– Tiene dificultad para iniciar y concentrarse en una actividad, ya sea una conversación, leer o ver la televisión

– Parece que ya no está seguro por sí mismo o se siente inseguro y ansioso por estar solo.

Los cuidadores familiares también podrían considerar los servicios de día para adultos cuando tengan que trabajar o estar fuera de casa la mayor parte del día o si ellos mismos están experimentando efectos nocivos como ansiedad, frustración, depresión o problemas de salud.

Encontrar y evaluar programas

Para encontrar programas de atención diurna para adultos en su zona, puede escribir su código postal en el directorio de búsqueda de la Asociación Nacional de Servicios Diurnos para Adultos o ponerse en contacto con la Agencia Local sobre Envejecimiento, que puede encontrar a través del Localizador de Atención a Personas Mayores del gobierno federal o llamando al 800-677-1116.

Una vez que identifique un centro que parezca satisfacer las necesidades de su ser querido, el siguiente paso es visitar las instalaciones. La asociación recomienda hacer algunas preguntas básicas de funcionamiento como éstas:

– ¿Cuánto tiempo lleva el centro en funcionamiento?

– ¿Qué licencias, certificaciones y acreditaciones tiene?

– ¿Cuál es la proporción entre el personal y los asistentes (cuanto más baja, mejor), y qué tipo de formación reciben los empleados?

– ¿Qué días y horas está abierto?

– ¿Cuál es la política sobre las llegadas tardías o las recogidas si no va a utilizar los servicios de tránsito que proporciona el centro?

También querrá explorar la gama completa de servicios del centro.

¿Ofrece terapia física, ocupacional o del habla? Casi la mitad de los centros lo hacen. ¿Cuenta con atención especializada para afecciones como la pérdida de memoria?

Pregunte si el centro crea planes de servicio individuales para los asistentes, con qué frecuencia se actualizan esos planes y si puede aportar su opinión.

Dedique algún tiempo a observar simplemente el centro en sí. ¿Parece limpio y agradable en general?

¿El mobiliario es cómodo y resistente, y las instalaciones son accesibles para sillas de ruedas? Hay una zona tranquila donde su ser querido pueda relajarse si siente la necesidad de un descanso?

¿Están los baños convenientemente ubicados con barras de apoyo y espacio para sillas de ruedas? Preste atención, también, a cómo interactúan el personal y los asistentes y si parecen estar cómodos unos con otros.

Ayudar a su ser querido a adaptarse

La transición a asistir a una guardería para adultos puede ser estresante para una persona mayor con demencia. La Asociación de Alzheimer sugiere un enfoque gradual.

Una vez que haya investigado un centro, lleve a su ser querido a comer o a una actividad. A continuación, comience a utilizar sus servicios un par de veces a la semana durante un mes más o menos antes de tomar una decisión final sobre la inscripción.

Su ser querido puede resistirse a la atención diurna para adultos al principio, pero los participantes a menudo se adaptan a ella después de varias semanas y comienzan a esperar ver a otras personas en el centro y participar en las actividades, dice la asociación. Si el programa no parece funcionar para su familiar, podría sacarlo del programa durante un tiempo e intentar reintroducirlo en el centro más adelante.

Nota del editor: Este artículo, creado originalmente en 2012, ha sido actualizado con información más reciente.

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