¿Cómo se trata un desgarro del ligamento colateral lateral?
Los desgarros del ligamento colateral lateral no se curan tan bien como los del ligamento colateral medial. Las roturas del ligamento colateral lateral de grado 3 pueden requerir cirugía.
En algunos casos, todo lo que se requiere es reposo, llevar una férula, tomar analgésicos como el ibuprofeno y hacer fisioterapia.
Su médico puede recomendarle que lleve una escayola o férula ligera que permita que su rodilla se mueva hacia atrás y hacia delante pero que restrinja el movimiento de lado a lado. Esto se suele llevar durante 72 horas. Dependiendo de lo bien que reduzca el dolor y la hinchazón, podrá empezar un programa de rehabilitación en unos días.
Cuando el dolor y la hinchazón hayan disminuido, debería poder empezar a hacer ejercicios para recuperar la fuerza y la amplitud de movimiento de la rodilla. Si todavía tiene dolor al hacer estos ejercicios, vaya despacio para evitar una mayor irritación. Puede tardar hasta ocho semanas en recuperarse por completo, dependiendo del grado de su lesión.
Si el ligamento colateral lateral se rompió donde se une al hueso del muslo (fémur) o a la espinilla (tibia), el cirujano volverá a unir el ligamento al hueso utilizando puntos grandes o una grapa metálica para huesos.
Si el desgarro se ha producido en el centro del ligamento, el cirujano suele coser los extremos desgarrados.
Si el daño ha sido tan grave que no puede repararse, el cirujano puede reconstruir un tendón utilizando un injerto tomado de un tendón de los músculos del muslo (cuádriceps) o de los isquiotibiales.
La reconstrucción lateral de la rodilla es un procedimiento de rodilla abierta, lo que significa que no se realiza artroscópicamente. El injerto de tendón se pasa a través de túneles óseos y se fija al fémur y al hueso de la parte inferior de la pierna mediante tornillos o postes o con puntos de sutura atados alrededor de un poste.