Es posible que recientemente hayas oído hablar del fallecimiento del actor John Hillerman, que interpretaba a Higgins en la querida serie de televisión Magnum, P.I. Si veías la serie con regularidad, probablemente también eras fan de Tom Selleck.
Durante muchos años, Tom Selleck lo petó como el personaje principal Thomas Magnum, y la gente lo sintonizaba para ver al hábil detective y su famoso bigote. A día de hoy, su bigote es uno de sus rasgos más reconocibles.
Pero hay más cosas en el tipo que su vello facial, una de ellas es su vida familiar. En el mundo de Hollywood, donde parece que los matrimonios son efímeros para muchos, Tom y su segunda esposa, Jillie Mack, siguen adelante. Uno de los secretos de su firme unión? La privacidad.
En los años 80, cuando Tom Selleck iluminaba la pequeña pantalla, los paparazzi se metían constantemente en sus asuntos. Después de que él y su primera esposa se divorciaran, era un soltero elegible a los 38 años. Cuando conoció a Jillie en 1983, ella era una actriz londinense que protagonizaba la exitosa obra Cats!.
En 1987, los dos se fugaron en una ceremonia privada en el lago Tahoe, utilizando alias cuando se organizó la boda. El ministro no descubrió la verdadera identidad de la pareja hasta justo antes de las nupcias. Eso marcó un nuevo capítulo en su historia de amor.
Treinta años después, los dos siguen felizmente casados. Cuando Tom y Jillie tuvieron a su única hija, Hannah, en 1988, Tom redujo su horario de trabajo para centrarse en la familia. Así, selló el final de Magnum, P.I. para pasar más tiempo con ellos.
A lo largo de los años hemos visto a Tom aceptar papeles en el cine y seguir actuando en la pequeña pantalla, pero ser padre de Hannah y de su hijo Kevin (de su primer matrimonio) ha sido su papel favorito. Él y Jillie han encontrado un equilibrio en la crianza de Hannah, y él ha declarado al New York Daily News:
«No hacemos nada ni tomamos ninguna decisión sin consultarnos. Y si uno de nosotros toma una decisión que involucra a Hannah, el otro padre apoya completamente esa posición, aunque no esté de acuerdo.»
En la actualidad, Tom y Jillie viven en un extenso rancho en California donde cuidan de los aguacates. Él también se dedicó a la cría de caballos, y también enseñó a su hija ecuestre profesional el negocio.
Tom ha sido, comprensiblemente, muy cuidadoso a la hora de exponer su vida privada al público, queriendo en cambio proteger a su familia. Esto le ha ayudado a mantener el equilibrio y le ha permitido cultivar un entorno propicio para su matrimonio y su familia.
Al mantenerse discreto y fuera de los focos de Hollywood mientras trabaja, Tom ha podido dar a las personas que más quiere lo que se merecen: tiempo. Si eso significa reorganizar algunas obligaciones laborales, que así sea. Esperamos que la pareja consiga disfrutar de treinta años más juntos!
¿Qué opinas de su duradero matrimonio en Hollywood? Tienes algún secreto especial para un matrimonio largo?
¿Eres fan de Tom Selleck? Echa un vistazo a estas 5 cosas que tal vez no sabías sobre el chico del «alijo»