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Cuando uno sueña con unas vacaciones (o con vivir) en el trópico, a menudo lo primero que imagina es la costa. Largas extensiones de arena con palmeras meciéndose con la brisa marina. Las olas que bañan suavemente la orilla. Jugar en las olas o ponerse una máscara y explorar el colorido mundo sumergido. Sí, es fácil hablar de playas, pero definitivamente no es tan fácil elegir las cinco mejores.

Las playas de Costa Rica tienen todas diferentes personalidades: desde las más bulliciosas hasta las más desiertas. Con arenas que van desde el negro volcánico hasta el dorado y el blanco. El nivel de las olas varía desde el oleaje profesional hasta las suaves calas protegidas. A pesar de ser un país pequeño (del tamaño de Virginia Occidental) con un litoral relativamente pequeño de 801 millas en el Pacífico y el Caribe, Costa Rica tiene una playa que se ajusta a sus deseos. Aquí están nuestras cinco mejores y una sexta extra.

Manzanillo

La costa caribeña de Costa Rica está a unas buenas cuatro horas en coche de la capital, San José, y es la región menos desarrollada del país. Si se toma la autopista costera (en realidad es una carretera de dos carriles) al sur de Limón, en dirección a Panamá, se llega al final de la carretera en el asentamiento de Manzanillo.

La playa de Manzanillo es perfecta para los amantes de la naturaleza. La arena es de un hermoso color blanco dorado y las aguas son suaves. Justo al sur se encuentra el Refugio Nacional de Vida Silvestre Gandoca Manzanillo, donde puedes encontrar una serie de calas bordeadas de palmeras colgantes. Elija una y pase un día tomando el sol y buceando en las aguas cristalinas. El mundo submarino aquí es increíble.

Hay algunos pequeños hostales y cabinas en la zona, o puedes quedarte en la ciudad principal de Puerto Viejo, a 25 minutos en coche hacia el norte, con una variedad mucho mejor de alojamiento, restaurantes y entretenimiento.

Dominical

Dominical, en la costa sur del Pacífico, es un pueblo de pescadores convertido en un punto caliente de surf que atrae a una multitud claramente bohemia. A pesar de su popularidad en el circuito de mochileros, sigue siendo bastante discreto.

La estrecha carretera de la playa está repleta de pequeños hoteles y restaurantes al aire libre que sirven ceviche y tacos de pescado, y cerveza Imperial fría, un pasatiempo popular en un día caluroso y húmedo. Lo que ocurre casi todos los días en esta parte del país.

Las exuberantes colinas de la selva cercana proporcionan un espectacular telón de fondo a lo largo de esta parte de la costa. Aquí se puede avistar fauna exótica como tucanes, monos y perezosos, o tomar asiento y ver la acción de los surfistas en algunas de las mejores olas del país. También se puede curiosear entre las mercancías de los artesanos instalados a la sombra a lo largo de la playa.

Playa Biesanz

Manuel Antonio es el destino de playa más visitado de Costa Rica, con el parque nacional del mismo nombre agotando las entradas la mayoría de los días. Por ello, este destino del Pacífico central puede llenarse de gente, sobre todo en temporada alta, de diciembre a abril.

Como alternativa alejada de las rutas turísticas, puede visitar Playa Biesanz, que se encuentra justo al norte de las playas populares. Siga la pequeña señal de la carretera principal junto al Hotel Parador. Hay un hueco en la valla; baje unos 15 minutos y se encontrará con una playa de arena blanca de impresionante belleza en una cala bordeada de acantilados cubiertos de árboles.

Durante la semana y en temporada baja, puede que sólo comparta la playa con monos aulladores y perezosos de dos dedos que se sienten atraídos por los almendros tropicales que crecen en la playa.

Tamarindo

Tamarindo no es una joya oculta. Es una conocida y bulliciosa pequeña ciudad turística en la costa norte del Pacífico con restaurantes, bares y tiendas en abundancia. Una meca del turismo… al menos para Costa Rica. Comparada con Cancún o Fort Lauderdale, es diminuta. Y los expatriados que se han instalado aquí disfrutan del ambiente de pueblo pequeño con un toque internacional.

Se gana un lugar en la lista no por la tranquilidad o la abundante naturaleza, sino por todas las comodidades que ofrece la ciudad, justo en la larga playa de arena arqueada: clases de surf, viajes de pesca, cruceros en velero al atardecer, hora feliz y puesta de sol en uno de los muchos bares de la playa, música en vivo, vendedores de recuerdos, paseos a caballo y mariachis ambulantes.

Montezuma

En el extremo sur de la Península de Nicoya, en la costa norte del Pacífico, el diminuto pueblo de Montezuma es ideal para quienes buscan un destino remoto. Aquí no encontrará ningún desarrollo importante. El centro del pueblo está formado por unos pocos restaurantes, hoteles y tiendas. Es un poco difícil llegar a esta parte de Costa Rica – no está en la ruta del autobús y las carreteras pueden ser difíciles, especialmente en la temporada de lluvias de mayo a noviembre.

La selva envuelve la laguna de la playa y la pequeña comunidad de expatriados te dirá que aquí hay un poder curativo, lleno de belleza natural.

Algo único en el Océano Pacífico, en Montezuma puedes ver el amanecer en lugar del atardecer porque está orientado al este de la península. Y si caminas por la playa desde el pueblo, encontrarás una hermosa cascada de agua dulce justo en la arena, con piscinas para remojarse y nadar.

Bonus: Playa Conchal

En la Costa Dorada del Pacífico Noroeste, encontrarás una playa con arena blanca que brilla. El secreto del brillo es que la arena está formada por conchas finamente molidas (conchal es la palabra española para concha), en lugar de verdaderos granos de arena. Escondida detrás del campo de golf de Reserva Conchal y de los hoteles Westin y W, da la sensación de ser una playa privada, pero cualquiera puede visitarla.

Aparque en la plaza del pueblo de Brasilito, justo al norte, y camine los 400 metros. Ya no se puede conducir ni aparcar en la playa. Por eso, los grandes grupos de turistas y locales se han trasladado a playas de más fácil acceso en la zona.

Con el fondo de arena chispeante, el agua adquiere un tono azul casi caribeño, lo que es estupendo para practicar snorkel y deportes acuáticos.

Video de Playa Conchal