Definición de epistolario
El epistolario proviene de una palabra griega, epistolē, que significa «carta». El epistolario es un género literario perteneciente a las cartas, en el que los escritores utilizan cartas, diarios y anotaciones en sus obras, o cuentan sus historias o entregan mensajes a través de una serie de cartas. Aunque el formato habitual del epistolario son las cartas, los escritores utilizan a veces otras formas de documento, como recortes de periódico y entradas de diario. Recientemente, los escritores también utilizan documentos electrónicos como correos electrónicos, blogs, emisiones de radio y grabaciones.
Ejemplos de epistolario en la literatura
Ejemplo #1: El color púrpura (de Alice Walker)
La novela de Alice Walker El color púrpura, es un buen ejemplo de novela epistolar en la que una adolescente negra empobrecida, Celie, cuenta su historia a través de la escritura de cartas tanto a su hermana como a Dios. Aquí, los lectores pueden conocer la difícil vida de Celie a través de sus palabras y de las experiencias directas a las que se ha enfrentado. Alice Walker ha optado por dejar que los lectores se encuentren con esta historia utilizando la voz de Celie, proporcionando a ésta un poder que no podría tener en la vida cotidiana. Sin embargo, en la adaptación cinematográfica de esta novela, estas cartas se hicieron eco a través de los monólogos de los personajes.
Ejemplo #2: Frankenstein (De Mary Shelley)
Mary Shelley comenzó su primera novela, Frankenstein, en forma de cartas. Utiliza tres narradores o perspectivas que permiten a los lectores formarse una opinión sobre la narración. El primer narrador es Robert Walton, que da su punto de vista sobre Víctor. Robert registra las confesiones y la narración de Víctor cuando está muriendo. El segundo narrador es el propio Víctor, que da su punto de vista sobre Walton. Por último, la criatura interrumpe a Víctor y los lectores reciben su punto de vista. Es Walton quien comienza y termina esta novela relatando una serie de sucesos a través de cartas a su hermana, creando suspense al utilizar la palabra «demonio». Las cartas de Víctor y la perspectiva del monstruo, por otro lado, dan marco al cuerpo principal de la narración.
Ejemplo #3: Drácula (De Bram Stoker)
Bram Stoker ha empleado el formato epistolar en su exitosa y ampliamente reconocida novela decimonónica, Drácula. El autor ha recopilado toda la novela en forma de cartas, recortes de periódico, entradas de diario, notas del médico, telegramas y diarios de a bordo. Los narradores de esta novela son los protagonistas, que la complementan con recortes de periódico para relatar diferentes acontecimientos. Aunque esta novela recurre a la forma epistolar, reduce el final de la narración.
Ejemplo #4: Pamela (De Samuel Richardson)
La novela Pamela de Samuel Richardson es otro ejemplo notable de este tipo de novelas en las que se encuentra el dispositivo epistolar. En esta novela, Pamela intenta huir de su lascivo amo, el señor B. Cada vez que su amo intenta seducirla, ella expresa sus inseguridades a sus empobrecidos padres escribiéndoles cartas. El señor B., sin embargo, intercepta sus cartas y da a sus padres una información errónea al trasladarla a otra finca, y allí comienza a escribir un diario, con la esperanza de que algún día se lo envíe a sus padres. Al final, la señora Jewkes encuentra cartas escritas por Pamela, y se las da al señor B., quien se da cuenta del carácter piadoso de Pamela, cambia de opinión y decide casarse con ella.
Ejemplo #5: Diario de una joven (de Ana Frank)
Una adolescente, Ana Frank, escribió Diario de una joven, registrando sus experiencias durante la Segunda Guerra Mundial. Relata sus sentimientos y pensamientos, incluyendo algunos detalles importantes y otros triviales. Después de un mes escribiendo este diario, Ana, junto con los miembros de su familia, se vio obligada a esconderse en algún edificio de Ámsterdam para evitar la persecución religiosa a manos de los nazis. Sin embargo, todos ellos murieron en 1944, excepto su padre Otto Frank, que hizo publicar su diario en 1947. El formato del diario de Ana Frank proporciona a los lectores una visión íntima de los sentimientos y pensamientos de Ana en los momentos difíciles. También es destacable que Ana describa sus sueños y esperanzas a través del contexto histórico.
Función del epistolario
La forma epistolar puede añadir realismo a una narración, ya que imita el funcionamiento de la vida real. Por tanto, es capaz de describir diferentes puntos de vista. La función principal de esta forma de escritura es ofrecer a los lectores una visión íntima de los sentimientos y pensamientos de los personajes, y desarrollar una conexión directa con los acontecimientos a través de las cartas sin la interferencia del autor. Así, esta técnica convierte la obra literaria en una experiencia real para los lectores. Además, la presentación de los acontecimientos desde diferentes puntos de vista da a la historia verosimilitud y dimensión.