5 consejos para imprimir en 3D con material ABS
Ya se ha identificado que el material ABS es una opción popular para muchas industrias, pero tiene competidores, como el PLA o el PETG. El ABS se crea de una manera diferente al PLA, ya que éste se deriva del almidón de maíz (biodegradable), lo que le da un punto de fusión más bajo y significa que no es o es menos adecuado para muchas de las aplicaciones para las que se utiliza el ABS.
Cuando se imprime con material ABS es importante tener en cuenta los humos que emite. Esto ocurre cuando el ABS alcanza su punto de fusión y sale del cabezal de extrusión. Estos humos pueden ser tóxicos. Por lo tanto, es importante que, si está trabajando en la misma habitación que la impresora 3D, este espacio esté bien ventilado.
Para ayudarte con la impresión 3D de filamento ABS, te damos nuestros 5 consejos para usar el filamento ABS:
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Importancia de la primera capa
La deformación y el despegue pueden ser un problema y por ello, una buena primera capa es esencial para un resultado final exitoso cuando se imprime con material ABS. Asegúrese de que la plataforma de construcción está bien calibrada. Preferiblemente calibrada automáticamente, minimizando el riesgo de un error humano. La mejor superficie para imprimir material ABS sin adhesivos es una placa de construcción de PEI. Una vez terminada la impresión 3D y finalizado el proceso de enfriamiento, el objeto puede ser retirado de la superficie de impresión con bastante facilidad, resultando en una superficie inferior limpia y lisa.
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La plataforma de construcción calefactada debe estar siempre encendida
Por lo general, una temperatura de entre 80 y 110 grados será adecuada para la plataforma de construcción calefactada cuando se utilice material ABS. Cuanto mayor sea la superficie (huella) de la pieza impresa en 3D, más probable es que haya más fuerzas de deformación presentes. Para mejorar la adherencia, aplique laca para el cabello a la plataforma calentada. Del mismo modo, puede utilizar una placa de construcción de PEI para aumentar la adherencia. Sitúe el objeto lo más cerca posible del centro de la cama de impresión calentada. Por la razón de que la temperatura se conserva mejor allí, disminuyendo la posibilidad de alabeo.
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Cuidado con el encordamiento (temperatura demasiado alta)
Si la temperatura es demasiado alta entonces comúnmente notará encordamiento entre las partes que se separan. Porque el extrusor dejará escapar pequeñas cantidades de plástico cuando se mueva entre las zonas separadas. Si esto ocurre, es importante que la temperatura se reduzca gradualmente hasta el punto en que el extrusor ya no gotee el material ABS. La temperatura recomendada del extrusor es de entre 230 y 260°C, dependiendo de la marca de filamento y de la impresora 3D.
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Las capas no se adhieren (temperatura demasiado baja)
Si la temperatura es demasiado fría, hará que el material ABS no se adhiera a la capa anterior. Esto hará que la superficie se sienta áspera. También es posible que una pieza no tenga la resistencia necesaria y, por lo tanto, se pueda separar fácilmente. Si esto ocurre, la temperatura del extrusor (boquilla) debe aumentarse gradualmente. Haga esto hasta que cada capa tenga buenos segmentos de línea y la pieza sea fuerte. Puede cambiar la temperatura con la pantalla táctil de la impresora 3D o en la sala de control online.
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Mantener el filamento ABS seco
Es importante almacenar el material ABS correctamente ya que esto tendrá un impacto positivo en la calidad de la impresión. Esto también minimiza los problemas que vienen con la deformación y el despegue. Por lo tanto, después de que el trabajo de impresión se hace, el filamento debe ser almacenado en un recipiente o bolsa que es hermético. Si el filamento adquiere humedad, es posible secarlo antes de utilizarlo para la impresión 3D. A diferencia del plástico PLA, el ABS no absorbe tanto el agua, pero aun así hay que tener en cuenta la importancia de almacenarlo correctamente.