Cultive la orquídea dendrobium en un lugar luminoso para una mejor floración. Como muchas orquídeas, estas plantas pueden soportar algo de sol directo en sus hojas, especialmente en el norte. Si no recibe suficiente luz, no florecerá.
Riegue las orquídeas dendrobium cuando el musgo o la corteza comiencen a secarse. Algunos tipos pueden almacenar agua en sus tallos, lo que las hace tolerantes a la sequía. Si no puede regar su orquídea dendrobium durante un largo periodo y pierde sus hojas, no pierda la esperanza; con buenos cuidados, puede rebrotar una vez que vuelva a tener una humedad regular. Una forma fácil de regarla es sumergir el musgo en agua durante unos 10 minutos. Luego deje la orquídea hasta que el musgo comience a secarse y remójela de nuevo.
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Estas orquídeas aprecian la humedad media a alta, así que si el aire de su casa es especialmente seco, aumente la cantidad de humedad para mantener su dendrobium en su mejor momento.
Replante su orquídea cuando la corteza o el musgo en el que crece empiece a romperse. Esto suele ocurrir cada dos años aproximadamente, pero puede variar en función de varios factores. Si la corteza o el musgo se rompen demasiado, las raíces de su orquídea no recibirán tanto aire como les gusta y la planta empezará a sufrir.
Fertilice las orquídeas dendrobium en primavera y verano con un fertilizante para orquídeas para que florezcan mejor. ¿No está seguro de la cantidad de fertilizante que debe utilizar? Asegúrese de seguir las instrucciones del envase del producto.
Nota: Las orquídeas Dendrobium son hermosas de ver, pero no están destinadas al consumo humano o animal.