Intoxicación por rodenticida (warfarina) en perros

¿Qué es el rodenticida warfarina?

El rodenticida warfarina es un rodenticida anticoagulante cumarínico de primera generación, de venta libre, utilizado para matar ratones, ratas y otras plagas. Los anticoagulantes cumarínicos son un grupo de compuestos naturales y sintéticos que impiden la coagulación de la sangre.

¿Qué es la intoxicación por rodenticida warfarina?

La intoxicación por rodenticida warfarina (nombres de marca: Bar Bait, Contrax-W, Co-Rax, Coumafene, Cov-R-Tox, Denkarin, Dethmor, Dicusat E, Final, Kypfarin, Luxarin, Prolin, Ramorin, Rat and Mouse Killer, Ratoxin, RAX, Rodex, Tox-Hid, Warfotox, Zoocoumarin) ocurre cuando un perro ingiere el rodenticida accidentalmente. Esto suele ocurrir cuando el veneno se coloca en los edificios y en sus alrededores sin portacebos de protección, lo que permite el acceso al veneno de los perros y otros animales no intencionados.

¿Cómo se produce el envenenamiento?

El rodenticida Warfarin impide que la vitamina K1 funcione correctamente en el organismo. La vitamina K es necesaria para la activación de los factores de coagulación; estos factores de coagulación son necesarios para ayudar a la formación de coágulos y para detener las hemorragias activas. Por lo tanto, cuando la warfarina inactiva la vitamina K1, el organismo ya no puede formar coágulos y el sangrado se producirá de forma incontrolada (hemorragia).

¿Cuáles son los signos clínicos de la intoxicación por rodenticidas con warfarina?

Los signos clínicos de la intoxicación son la hemorragia (sangrado) que suele producirse unos 2-3 días después del consumo. Los primeros signos clínicos suelen estar asociados al sistema respiratorio, como tos (a veces con sangre), dificultad para respirar, respiración rápida o intolerancia al ejercicio.

Otros signos clínicos incluyen hinchazón de las articulaciones, hinchazón bajo la piel o sangrado por la nariz, la boca, la vagina o el recto. También pueden aparecer signos gastrointestinales como diarrea con sangre, heces negras y vómitos con sangre. Otros signos son la falta de pulso, la palidez de las encías, la cojera, el letargo, la depresión, los sonidos cardíacos apagados y el colapso. Sin tratamiento, finalmente se producirá la muerte.

¿Cómo se diagnostica la intoxicación por rodenticidas con warfarina?

La intoxicación por rodenticidas con warfarina se diagnostica mediante una combinación de antecedentes de exposición o ingestión de warfarina, signos clínicos y pruebas de diagnóstico, incluidas las pruebas de tiempo de coagulación.

Los análisis de sangre son útiles para identificar la anemia, los recuentos bajos de plaquetas y los tiempos de coagulación prolongados. Las radiografías (rayos X) y la ecografía pueden identificar la presencia de líquido (sangre) en el pecho o el abdomen. Los análisis especiales de la sangre o el hígado pueden confirmar la exposición a productos específicos como la warfarina, lo que es útil para decidir la duración de la terapia con vitamina K1.

¿Cómo se trata la intoxicación por rodenticidas con warfarina?

Si el rodenticida se ha ingerido recientemente, su veterinario inducirá el vómito seguido de la administración de carbón activado para evitar una mayor absorción del rodenticida. Una vez que los signos clínicos se han desarrollado, inducir el vómito ya no es útil, y el manejo médico es el tratamiento de elección.

«Se deben administrar altas dosis de vitamina K1 durante varias semanas después de la exposición.»

Se deben administrar altas dosis de vitamina K1 durante varias semanas después de la exposición para reemplazar la vitamina K1 dañada en el cuerpo. Además de la administración de suplementos de vitamina K1, puede ser necesario un cuidado de apoyo dependiendo de los signos clínicos. Esto incluye la terapia de fluidos intravenosos y las transfusiones de sangre para tratar la hemorragia potencialmente mortal, y la extracción de sangre de alrededor del corazón o los pulmones para mejorar la respiración y la circulación si es necesario.

¿Qué cuidados necesitará mi perro después del tratamiento?

La suplementación con vitamina K1 debe continuar hasta 6 semanas después de la exposición a un rodenticida anticoagulante. Aproximadamente 36-48 horas después de suspender la vitamina, deben repetirse las pruebas de tiempo de coagulación; la suplementación ya no es necesaria si el resultado es normal. Durante las primeras fases de la recuperación en casa, el paciente debe estar confinado para evitar lesiones que puedan provocar hemorragias. Asimismo, debe administrarse una dieta de proteínas de alta calidad durante varios meses después de la exposición tóxica. Una vez que se interrumpe la administración de suplementos de vitamina K1, el paciente puede volver a sus actividades habituales.

Contribuidores: Rania Gollakner, BS DVM

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