Los callos o callosidades son áreas de piel engrosada que se desarrollan en los pies debido a la fricción y presión repetida, los cuales en ocasiones pueden ser muy molestos y dolorosos.
Éstos pueden aparecer en el dedo gordo o en la parte superior del pie, así como en la parte inferior del mismo. Normalmente se manifiestan a nivel de la planta del pie, mas no del empeine.
Sin importar dónde se encuentren, los callos pueden causar daño y conducir a problemas graves en las personas con diabetes o una circulación disminuida, según la American Podiatric Medical Association (APMA).
«Los callos y callosidades leves pueden no requerir tratamiento. Si un callo no te está molestando, probablemente debas dejarlo en paz», comunicó la asociación.
«Si los callos están causando dolor y malestar, o inhibiendo tu vida diaria en cualquier forma, consulta a un podólogo. Además, las personas con diabetes, mala circulación u otras enfermedades graves deberían revisar el estados de sus pies» regularmente, aconsejó el grupo.
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Tu médico puede sugerirte cambiar tus zapatos y/o añadirles relleno (almohadilla o cojín) si padeces de callos o callosidades suaves.
No obstante, es mejor que los más grandes sólo sean tratados por un médico. Un podólogo puede utilizar una cuchilla quirúrgica para rasurar el engrosamiento de la piel —justo en su consultorio. Es un remedio sin dolor, porque la piel ya está muerta. Tratamiento adicional puede ser necesario únicamente si el callo o callosidad vuelve a aparecer, destacó la APMA.
Pueden aplicarse inyecciones de cortisona si el callo está causando un dolor significativo. En algunos casos, puede ser necesaria la cirugía, afirmó la asociación.
Para ayudar a prevenir los callos y callosidades, debes usar un calzado apropiado. Si tienes deformidades en el pie o o en tus dedos, pregúntale a un podólogo qué zapatos son los mejores para tu condición.
Las almohadillas de gel pueden disminuir la fricción y la presión que conducen a los callos y callosidades. Un podólogo puede ayudarte a encontrar los mejores lugares para colocar dichas almohadillas, finalizó la APMA.