Desde hace tiempo, o al menos en los últimos seis años, Toyota y Lexus han ocupado el primer puesto en la encuesta anual de fiabilidad de vehículos de Consumer Reports. Era casi tan evidente como el cielo azul y los impuestos. Ya no. Mazda ha destronado a ambos, ascendiendo al puesto número 1 por primera vez.
Mazda se hizo con el primer puesto gracias a sus trenes motrices y a que utilizó duraderas (y más divertidas) transmisiones automáticas de seis velocidades en lugar de las CVT, que suelen ser más frágiles. Mazda tampoco recurrió a sistemas de infoentretenimiento demasiado sofisticados, sino que se opuso a las tendencias del sector con cabinas que desaconsejan el uso de pantallas durante la conducción y fomentan los botones y diales que pueden manejarse sin apartar la vista de la carretera. El Mazda más fiable fue el MX-5 con una puntuación de 98 sobre 100, seguido por el CX-30, el CX-3 y el CX-5, todos con una puntuación de 85 o más.
En general, Toyota y Lexus siguen estando muy por encima de la media, ocupando el segundo y tercer puesto respectivamente. Lexus fue arrastrado por problemas relacionados con el LS, pero CR no especificó la naturaleza de esos problemas.
Buick fue la marca que más mejoró, subiendo 14 puestos para ocupar el cuarto lugar. Su actuación se atribuye en gran medida al Encore, que recibió una puntuación de 91. Honda subió siete posiciones para completar los cinco primeros puestos, pero se le negó una mejor posición debido a que las puntuaciones del Passport y el Odyssey se situaron en la mitad de los 30.
Entre las marcas europeas, Porsche se situó en lo más alto, en el número 9. BMW subió cinco puestos hasta el 12º, mientras que Audi mantuvo su posición media en el 14º puesto, y Mercedes ocupó el último lugar entre las tres grandes alemanas, en el 20º lugar.
En la parte inferior de la lista se encontraban Ford, Mini, Volkswagen, Tesla y Lincoln cayendo 11 puestos hasta el último lugar. En particular, el Ford Explorer fue señalado por tener el menor número de puntos de cualquier modelo, apenas registrando una puntuación de 1, gracias a los problemas con los motores, la carrocería, el equipo de potencia, la electrónica y las transmisiones.
El recién presentado crossover Model Y de Tesla arrastró la posición del fabricante de coches eléctricos hasta el penúltimo lugar. Los propietarios del Modelo Y, que comenzó a producirse en enero, han informado de paneles de la carrocería mal alineados que tuvieron que ser arreglados y de pintura desajustada, incluyendo, en un caso, pelo humano pegado en la pintura, según Consumer Reports. El Modelo Y terminó con una calificación de fiabilidad «mucho peor que la media».
Las clasificaciones se toman anualmente sobre la base de una encuesta de 300.000 vehículos.
En este reportaje se ha utilizado información de AP.