Últimamente he echado de menos la repostería tradicional de mi pequeña isla Puerto Rico. Hace dos semanas me levanté pensando en unos pastelillos de guayaba, y luego fue el Pan de Mallorca. ¿Cómo no echarlos de menos? De vuelta a la isla, eran mis favoritos cuando necesitaba una nota dulce para el desayuno. Así que preparé algunos hace unos días!

Estos delicados y dulces bollos con forma de nautilus están rellenos de capas sobre capas de grasa (mantequilla dulce), por lo que son suaves, hojaldrados y ricos en dulzura. El pan de Mallorca es uno de los panes más famosos de Puerto Rico, especialmente para el desayuno, y se puede encontrar en casi todas las panaderías de la isla. Es muy común tomar un Mallorca caliente por la mañana con una taza de buen café fuerte, como el que hacemos en la isla. O lleno de jamón y queso como un sándwich. Sí. La combinación del pan dulce con el salado del jamón y el queso es sencillamente increíble. La masa se enrolla y enrolla para crear capas aireadas y hojaldradas, luego estos panecillos turbios se hornean hasta que se doran y se cubren con abundante azúcar en polvo, exactamente como lo hacemos en Puerto Rico. El pan de Mallorca es un pan común en la mayoría de los antiguos territorios españoles de América Latina y Filipinas. ¡Gracias, Señor, por haber nacido en un lugar donde existen los mallorquines! Lo mejor es que no hace falta volar a P.R. para comer un buen Mallorca. Como buena anfitriona, ¡compartiré esta receta con vosotros! ¡¡¡Así que a disfrutar de este pellizco de azúcar!!!

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Ingredientes:

  • 5 tazas de harina para todo uso
  • 4 cucharaditas de levadura instantánea o de subida rápida
  • 1 cucharadita de sal
  • 1 taza de leche entera, a temperatura ambiente
  • ½ taza de agua
  • 4 huevos grandes, temperatura ambiente
  • ¾ de taza de azúcar granulada
  • 10 cucharadas (5 onzas) de mantequilla sin sal, ablandada, más 6 cucharadas (3 onzas) derretida
  • Azúcar de repostería
  • Dos hojas para hornear ( estas son mis favoritas: Hojas para hornear Wilton)

¡Vamos a hornear!

  1. Bate la harina, la levadura y la sal en un bol de la batidora. Bata la leche, el agua, los huevos y el azúcar granulado en un vaso medidor de líquidos de 4 tazas hasta que el azúcar se haya disuelto.
  1. Utilizando el gancho de amasar a velocidad baja, añada lentamente la mezcla de leche a la mezcla de harina y mezcle hasta que se empiece a formar una masa cohesiva y no quede harina seca, unos 2 minutos, raspando el bol según sea necesario. Nota: Puede realizar este procedimiento con un bol grande y una espátula, una vez incorporados todos los ingredientes, transfiera la masa a una encimera ligeramente enharinada y amase a mano hasta formar una bola redonda y lisa, unos 10 minutos.
  1. Aumentar la velocidad a media-baja y amasar hasta que la masa empiece a separarse de los lados del bol pero se pegue al fondo, unos 5 minutos.
  1. Con la batidora en marcha, añadir la mantequilla ablandada, 1 cucharada cada vez, y amasar hasta que la mantequilla se incorpore completamente, unos 5 minutos. Continúe amasando hasta que la masa sea suave y elástica y se despegue de las paredes del bol pero se pegue al fondo, unos 3 minutos.
  1. Transfiera la masa a una encimera ligeramente enharinada y amásela a mano hasta formar una bola suave y redonda, unos 3 minutos. Coloque la masa con la costura hacia abajo en un cuenco o recipiente grande ligeramente engrasado, cubra bien con papel de plástico y deje que suba hasta que doble su tamaño, de 2 a 2½ horas.
  1. Linee 2 bandejas de horno con borde con papel de pergamino. Presione la masa para desinflarla. Transfiera la masa a una encimera ligeramente enharinada, divídala por la mitad y cúbrala sin apretar con un plástico engrasado.
  1. Pulse y enrolle 1 pieza de masa (mantenga la pieza restante cubierta) en forma de rectángulo de 18 por 12 pulgadas, con el lado largo paralelo al borde de la encimera.

    1. Pasa 2 cucharadas de mantequilla derretida por encima de la masa. Con un cuchillo de sierra, corte tiras de 2 pulgadas y cubra sin apretar con papel de plástico engrasado.Trabajando con 1 pieza de masa a la vez (mantenga las piezas restantes cubiertas), estire y enrolle en una cuerda de 10 pulgadas. Unte ligeramente la cuerda con mantequilla derretida, enróllela en una espiral y meta el extremo inferior por debajo. (Repita el proceso con la masa restante).

      1. Coloca los rollos en hojas preparadas, con una separación de unos 5 cm. Con un dedo, haga una hendidura en el centro de cada espiral. Cubra sin apretar con un plástico engrasado y deje que suba hasta que casi duplique su tamaño y la masa se retraiga mínimamente al pincharla suavemente con el nudillo, de 2 a 2½ horas.
      1. Ajuste la rejilla del horno a la posición media y caliente el horno a 350° F. Hornee una hoja a la vez hasta que los panecillos estén ligeramente dorados, aproximadamente de 12 a 15 minutos; gire la hoja a mitad del horneado. Transfiera los rollos a una rejilla y déjelos enfriar durante 15 minutos. Espolvorea con azúcar glas y sirve calientes.

        Recetas adaptadas del libro, Pan Ilustrado de las Cocinas de Prueba de América

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