Pirata famoso: Henry Morgan

El Rey Bucanero

A pesar de que algunas de sus acciones fueron brutales e ilegítimas, Henry Morgan no era un pirata. El galés fue un magnífico bucanero, sin duda el más famoso. Descrito como un líder notable y un temible conquistador, tuvo un par de batallas legendarias y tácticas únicas que le dieron fama y riqueza. Por todas sus hazañas, Morgan fue un verdadero héroe del Caribe y de la nación inglesa.

Henry Morgan nació alrededor de 1635 en Llanrhymny, Wells. Ya de joven, Henry era una persona ambiciosa y muy viva que no podía conformarse con una vida monótona en un lugar tranquilo. Decidió seguir adelante porque tenía el sueño de ser marinero. Aunque Morgan quería ganar riqueza y fama lo antes posible, el modo de vida pirata no le interesaba. Por lo tanto, se unió al ejército naval de Inglaterra para servir como bucanero.

Imagen de Henry Morgan

No se sabe con certeza cómo llegó Morgan a Jamaica, pero ocurrió en el en 1655, cuando la isla estaba ocupada por los bucaneros. Se unió a las fuerzas inglesas que atacaban y robaban las colonias españolas en el Caribe . Allí construyó su carrera de bucanero primero como soldado raso y pronto como marinero respetado. Al unirse a un famoso capitán, Christopher Myngs y su flota en algunas de sus expediciones, Morgan adquirió mucha más experiencia naval.

Finalmente, en 1662, se convirtió en capitán de un pequeño buque corsario. Su primera incursión exitosa fue en 1664, cuando un grupo de capitanes bucaneros hostigaron juntos. Saquearon muchos barcos y colonias en la costa de la península de Yutacán y la rica ciudad de Granada en Centroamérica.

Todos esos ataques le reportaron grandes ingresos económicos y también una excelente reputación . Compró una plantación en Jamaica y se casó con su prima, Mary Elizabeth. Ella era la hija del tío de Morgan, el coronel Edward Morgan, el gobernador de Jamaica. Edward Morgan murió poco después, en un ataque a la colonia holandesa. El nuevo gobernador de Jamaica fue Sir Tomas Modyford , que se convirtió en un muy buen amigo de Henry Morgan . Debido a esa amistad y a sus constantes éxitos, Morgan fue ascendido a vicealmirante de la flota jamaicana.

Mientras tanto, la actividad española aumentó en Cuba, por lo que Mayford eligió a Morgan para dirigir la flota jamaicana. En enero de 1668, más de 10 barcos y más de 500 soldados zarparon hacia Cuba. Una vez más Morgan se convirtió en una pesadilla para España. Conquistó fácilmente la ciudad de Puerto Príncipe sin grandes pérdidas. El problema fue que esta incursión sólo aportó a su ejército 50.000 piezas de a ocho. Muchos soldados decepcionados abandonaron a Morgan.

El intrépido Enrique planeó otro ataque de inmediato a pesar de que su ejército estaba casi reducido a la mitad. El objetivo era una ciudad fortificada y bien vigilada, Puerto Bello. La táctica que Morgan utilizaba durante este conflicto era crucial . Ancló sus barcos lejos de la ciudad y utilizó las canoas para acercarse a la ciudad silenciosamente en la noche. El ataque fue rápido, los guardias estaban desprevenidos y dos de los tres fuertes principales fueron conquistados fácilmente. Sin embargo, el tercero era casi imposible de ocupar. Entonces a Morgan se le ocurrió la brillante idea de utilizar a los monjes y monjas encarcelados como escudo humano. Con esa estrategia lograron conquistar el último obstáculo. Los bucaneros capturaron la ciudad y el gobernador de Panamá se vio obligado a pagar mucho por los esclavos. De aquella impresionante incursión se llevaron 250.000 piezas de a ocho.

El siguiente terror de Morgan tuvo lugar en Venezuela en 1669. Con 8 barcos y 650 tripulantes conquistó la ciudad de Marcaibo. Sus bucaneros torturaron a muchos ciudadanos venezolanos casi como los más crueles piratas, para descubrir todo el botín escondido .

En ese momento, Morgan era el rey indiscutible de todos los bucaneros . Tenia riquezas, el ejercito mas poderoso del Caribe , y lo que es mas importante, un exito constante. En la mayoría de los combates, Morgan realizó tales logros que incluso los españoles alabaron su valentía y liderazgo.

Con la poderosa fuerza de 1200 bucaneros y 30 barcos, su último gran ataque comenzó en 1670. Fue el mayor desafío y su principal objetivo: Panamá. Primero tomó el fuerte, San Lorenzo, que permitió a sus tropas llegar a Panamá a través de la selva. Sin embargo, resultó que ese viaje fue mucho más agotador de lo que Morgan esperaba. Perdió a mucha gente a causa del hambre y la enfermedad. Sin embargo, el carismático capitán de los bucaneros levantó la moral de todos y finalmente alcanzaron su objetivo. Se reunió un enorme número de españoles para defender la rica ciudad, pero no pudieron hacer nada contra el ejército supremo de los bucaneros. La ciudad fue tomada en el gran combate y luego totalmente saqueada y demolida. Esa fue la última incursión de Morgan.

En realidad, él no sabía que había cometido un acto de piratería . Inglaterra y España habían estado en paz cuando se produjo el último ataque, por lo que después de su regreso a Jamaica, Morgan fue rápidamente arrestado por el nuevo gobernador y enviado a Inglaterra para un juicio. Sin embargo, ese juicio nunca tuvo lugar. Morgan era un hombre poderoso e influyente con muchas grandes hazañas para Inglaterra a sus espaldas. Aunque fue prisionero de Estado, nunca fue castigado. Por el contrario, fue honrado por el Rey y ascendido a vicegobernador de Jamaica. En el período comprendido entre 1674 y 1682, siguió siendo militarmente activo en la defensa de la isla de los piratas.

Retiro & Legado de Henry Morgan

La gravedad de la destrucción de Panamá por parte de Morgan en 1671 alcanzó tal nivel que la ciudad entera tuvo que ser restablecida a varios kilómetros de sus ruinas originales, elevando las tensiones entre España e Inglaterra cuyos gobiernos habían firmado un tratado de paz un año antes, en 1670. Con el tratado pendiendo de un hilo, los ingleses decidieron destituir rápidamente a Henry Morgan de su puesto militar. Morgan fue arrestado y se le ordenó regresar a Inglaterra donde fue despojado de su cargo en la Armada. Sin embargo, debido a su importante influencia, Morgan no fue castigado por muchos de sus horribles actos. Fue nombrado caballero en 1674 y se le concedió el cargo de vicegobernador de Jamaica en 1675. Seis años después, en 1681, las relaciones entre Henry Morgan y el rey Carlos II se agriaron, lo que provocó su destitución del cargo de gobernador. El nuevo nombramiento para el puesto de Gobernador no pudo ser peor para Morgan, ya que fue concedido a su antiguo rival político Thomas Lynch.

Foto de Henry Morgan en Porto Bello

Inmediatamente después de llegar al puesto de Gobernador, Thomas Lynch lanzó varios ataques políticos contra Morgan, con mayor éxito al promover el libro de 1678 «De Americaensche Zee-Roovers» (Sobre los Bucaneros de América, hoy en día conocido como uno de los informes más importantes sobre la Era de la Piratería del siglo XVII) escrito por Alexandre Excqemelin, que lo describía en el informe como salvaje, sanguinario y responsable de muchos ataques horribles contra los nativos, la navegación naval y los ciudadanos de la ciudad de Panamá. Morgan contraatacó de inmediato, lanzando no sólo una campaña pública para desacreditar el libro, sino también una demanda por difamación en la que obtuvo no sólo doscientas libras inglesas de los editores del libro William Crooke y Thomas Malthus, sino también una retractación pública.

Morgan pasó el resto de su vida tranquilamente con su esposa, en una gran plantación. Cuando murió en 1688, casi no había bucaneros en activo en el Caribe.

Después de la muerte del gobernador Thomas Lynch, Morgan fue reintegrado al Consejo en 1688. Ese mismo año murió el 25 de agosto, muchos creen que de tuberculosis o dropsie. Dejó su patrimonio a sus dos ahijados y aseguró pagos regulares a su hermana. Henry Morgan fue enterrado en el cementerio de Palisadoes, en Jamaica, que se hundió en el mar durante el terremoto de 1692 que hizo que la mayor parte de la ciudad de Port Royal, la más rica y grande de las Indias Occidentales, quedara bajo las olas.

En los tiempos modernos Henry Morgan es recordado tanto como una figura histórica que jugó un papel destacado en la Edad de Oro de la Piratería, como uno de los comandantes navales más exitosos que logró aprovechar las tensas relaciones entre los gobiernos involucrados en el Nuevo Mundo para lanzar su propio ataque bucanero por todo el Caribe y obtener importantes riquezas para él, su tripulación y la corona inglesa. La versión romántica de él está presente en muchas películas y libros, incluyendo una mención en una popular franquicia cinematográfica de Hollywood «Piratas del Caribe».

En el verano de 2011 se informó de que los arqueólogos de la Universidad Estatal de Texas lograron localizar restos del buque insignia hundido de Morgan «Satisfaction». Posteriores inmersiones a la corriente oceánica lograron identificar el pecio como un barco mercante español «Encarnación» que se hundió frente a la costa de Panamá durante la poderosa tormenta de 1681.

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