Problemas de la vejiga en los gatos

¿Mi gato corre el riesgo de tener un problema urinario?

Los gatos con sobrepeso u obesos y los que llevan un estilo de vida sedentario tienen más riesgo de sufrir problemas urinarios que los gatos con un peso saludable y un estilo de vida activo. Los gatos mayores también son más propensos a la enfermedad renal crónica y a otras enfermedades sistémicas como las endocrinas.
Se ha sugerido que los gatos sometidos a un estrés importante son más propensos a tener problemas del sistema urinario. El estrés puede incluir nuevas incorporaciones a la casa, mudanzas, cambios en la dieta, una caja de arena mal colocada o de difícil acceso, y vivir en un hogar con varios animales. Si un gato y su propietario tienen una relación fuerte, el gato puede incluso captar el estrés del propietario, lo que puede provocar problemas de salud.

Tratamiento de los problemas urinarios en los gatos

Es fundamental que lleve a su gato al veterinario si nota alguno de los signos señalados anteriormente, ya que su veterinario podrá identificar el problema y ofrecer el mejor tratamiento posible.
Sin embargo, también puede tomar medidas para mantener la salud urinaria de su gato cambiando su estilo de vida y su dieta. Los gatos son naturalmente reacios a beber mucha agua. Descienden de mamíferos que habitan en el desierto y no pueden acceder al agua con regularidad, pero el agua es importante para mantener sano su sistema urinario. Aumentar la ingesta de agua puede ayudar a fomentar la micción y la dilución de la orina para ayudar a disminuir el riesgo de cristalización.
Puede animar a su gato a beber más agua colocando varios cuencos por la casa y no colocando los cuencos de agua junto a la comida, las cajas de arena o los lugares concurridos. Mantenga el agua a temperatura ambiente y llene el cuenco hasta el borde para que sea de fácil acceso. El agua corriente, como un grifo que gotea o una fuente de agua, también puede ser muy atractiva.
La dieta de su gato también puede contribuir a su salud urinaria, ya que ciertas dietas, secas o húmedas, pueden ayudar a aumentar el consumo de agua.
Los problemas urinarios son, desgraciadamente, comunes en los gatos, pero con el tratamiento adecuado recomendado por su veterinario podrá apoyar su salud a través de la dieta, el estilo de vida y la medicación cuando sea necesario.

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