En 1998, el jugador de primera base de los Cardenales de San Luis, Mark McGwire, y el jardinero derecho de los Cachorros de Chicago, Sammy Sosa, llevaron a los aficionados al béisbol a una carrera desenfrenada en busca del récord de jonrones de Roger Maris en una sola temporada, una temporada que, según algunos, salvó el béisbol. La historia de la legendaria carrera de jonrones es el tema del último documental de ESPN, Long Gone Summer, que se estrena el domingo por la noche.
Ambos superarían los 61 jonrones de Maris, McGwire ganando la carrera con 70 mientras que Sosa bateó 66 pelotas largas, incluyendo un récord de la MLB de 20 sólo en el mes de junio, de camino a ganar el MVP de la Liga Nacional. Lamentablemente, ambos están vinculados a las drogas para mejorar el rendimiento, lo que ha mantenido a ambos fuera del Salón de la Fama, una tendencia que parece probable que continúe dados los pésimos números que ambos han recibido en la votación a lo largo de los años.
Así que, ¿exactamente qué tan cerca han estado Sammy Sosa y Mark McGwire de ser votados en el Salón de la Fama del Béisbol Nacional?
Sammy Sosa y Mark McGwire tienen credenciales para el Salón de la Fama
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En circunstancias normales, Sammy Sosa y Mark McGwire probablemente habrían sido ambos miembros del Salón de la Fama en primera posición.
En 16 años con los A’s de Oakland y los Cardenales de San Luis, Mark McGwire fue 12 veces All-Star de la MLB, el Novato del Año de la Liga Americana en 1987, cinco veces líder en jonrones, tres veces ganador del Premio Slugger de Plata y ganó un título de la Serie Mundial en Oakland en 1989. Terminó su carrera con una línea de bateo de .263/.394/.588 y conectó 583 jonrones, actualmente el 11º en la lista de todos los tiempos, y añadió 1.414 carreras impulsadas.
En 18 años con los Rangers de Texas, los Medias Blancas de Chicago, los Cachorros de Chicago y los Orioles de Baltimore, Sammy Sosa fue siete veces All-Star, el MVP de la Liga Nacional de 1998, dos veces líder en jonrones y carreras impulsadas, seis veces ganador del Premio Slugger de Plata, y sigue siendo el único jugador en la historia de la MLB que ha bateado 60 o más jonrones en una temporada tres veces. Aunque perdió la carrera del 98 frente a Mark McGwire, ganó la batalla general, con 609 jonrones en su carrera, lo que le permite ser el noveno en la lista de todos los tiempos.
Estos son números dignos del Salón de la Fama para ambos. Pero dados sus vínculos con los PED, es probable que nunca ocurra.
Ambos están ligados a las drogas para mejorar el rendimiento
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Durante aquella famosa temporada del 98, Mark McGwire admitió haber usado androstenediona, un potenciador muscular de venta libre que había sido prohibido por numerosas organizaciones deportivas. Pero, en ese momento, la Major League Baseball no era una de ellas. Pero ciertamente no era el único producto que usaba en ese momento. En 2010, McGwire admitió haber consumido esteroides de forma intermitente durante casi una década, incluyendo la temporada de 1998.
Sammy Sosa, sin embargo, nunca ha admitido el uso de esteroides y ha negado durante mucho tiempo que los tomara en su época de jugador. Desgraciadamente, su nombre apareció en la ya famosa lista de jugadores que dieron positivo por PED en 2003 como parte de lo que se suponía era una encuesta anónima. Obviamente, ha tenido bastante efecto en los votantes del Salón de la Fama.
¿Qué tan cerca han estado Sammy Sosa y Mark McGwire del Salón de la Fama?
Para ser incluido en el Salón de la Fama del Béisbol Nacional, un candidato debe recibir el 75% de los votos de la Asociación de Escritores de Béisbol de América. Un jugador es elegible para estar en la papeleta durante 10 años, a menos que reciba menos del cinco por ciento de los votos en cualquier momento, momento en el que cae de la papeleta hasta 16 años después de su retiro. Si pasan los 10 años y el jugador no es votado, todavía puede entrar en el Salón si es votado por lo que ahora se llama el Comité de Eras (antes Comité de Veteranos). Mark McGwire y Sammy Sosa no han estado ni remotamente cerca de ser inducidos.
Aquí tienes un vistazo a cómo ha ido la votación desde que cada uno es elegible.