La Ortésica es la evaluación, fabricación y adaptación a medida de los aparatos ortopédicos, conocidos como «ortesis». La ortésica combina conocimientos de anatomía y fisiología, fisiopatología, biomecánica e ingeniería.
Las ortesis son dispositivos aplicados externamente que se utilizan para modificar las características estructurales y funcionales del sistema neuromuscular y esquelético. Una órtesis puede utilizarse para:
- Controlar, guiar, limitar o inmovilizar una extremidad, articulación o segmento corporal.
- Restringir el movimiento en una dirección determinada.
- Ayudar al movimiento.
- Reducir las fuerzas que soportan el peso.
- Ayudar a la rehabilitación de las fracturas tras la retirada de un yeso.
- Corregir la forma y la función de una parte del cuerpo.
- Para reducir el dolor.
- Para optimizar el rendimiento deportivo.
Los pacientes ortésicos necesitan un soporte externo para una parte del cuerpo debido a condiciones neuromusculares o esqueléticas como parálisis cerebral, escoliosis, espina bífida, lesión cerebral traumática, accidente cerebrovascular, plagiocefalia, esclerosis múltiple, lesiones deportivas y tensión en la espalda. Otros pacientes pueden necesitar ortesis porque tienen afecciones en los pies como consecuencia de la diabetes, arcos altos o planos, o estrés repetitivo.
Un ortesista es el principal clínico responsable de la prescripción, fabricación y gestión de las ortesis. Otros profesionales de la ortésica son los montadores, técnicos y asistentes de ortésica.