J.C. Penney desató sin querer la polémica al vender una tetera que, según los críticos, se parece a Adolf Hitler. El mango de la tetera presenta una protuberancia negra en ángulo que se asemeja al corte de pelo del Führer, y su pico se levanta en lo que parece un saludo nazi. Lo más llamativo de la fotografía es una franja negra en el centro de la tetera que recuerda el rasgo más famoso de Hitler: su pequeño bigote. Qué tan popular era ese estilo de bigote en la época de Hitler?
No mucho. Los historiadores se refieren regularmente al famoso bigote de Hitler como un «bigote de cepillo de dientes», que era una forma de vello facial de moda a principios del siglo XX, especialmente en el norte de Europa. El estilo recortado era un cambio modernista con respecto a los gruesos y amplios bigotes que habían sido populares en la Alemania del Kaiser Guillermo II. El elegante soldado alemán y piloto de carreras Hans Koeppen lucía el bigote de cepillo de dientes, al que un artículo del New York Times de 1908 se refería como «característico de su clase». El príncipe heredero alemán Wilhelm llevaba un cepillo de dientes durante la década de 1910. Incluso un joven Walt Disney se dejó un bigote de cepillo de dientes en 1925 para parecer mayor en las negociaciones comerciales. Como se cuenta a menudo, el bigote de cepillo de dientes perdió popularidad cuando se vinculó inextricablemente con el despreciado líder nazi. Pero este relato histórico tiene un fallo: el bigote de Hitler no era un cepillo de dientes clásico. Sus bigotes eran más tupidos y estrechos y, en el mejor de los casos, sólo se podría hablar de una «variante del estilo cepillo de dientes». Incluso en la cúspide de su poder, muchos alemanes pensaban que el vello facial de Hitler estaba terriblemente fuera de moda.
Los bávaros de la época de Hitler se referían a su estilo de bigote como un Rotzbremse, o «freno de mocos». Otros apodos incluyen Fliege (mosca), Zweifinger (dos dedos), o_Chaplinbart. Antes del ascenso de Hitler, el bigote pequeño se asociaba principalmente con Charlie Chaplin, tanto en Estados Unidos como en Europa. Una empresa vendía trajes de Chaplin que se basaban casi exclusivamente en el bigote para crear el parecido. Según un número de 1915 de la revista Motion Picture Magazine, hubo un breve momento de popularidad del bigote de Chaplin en Estados Unidos. Sin embargo, según la mayoría de los informes, el bigote nunca fue más que una novedad o una broma, como lo demuestra el otro portador famoso de este estilo: Oliver Hardy.
Algunos han sugerido que Hitler tomó prestado su estilo de acicalamiento de Charlie Chaplin, pero no hay pruebas para la afirmación. Sin embargo, incluso el Führer sabía que su bigote no estaba precisamente de moda en Alemania. Cuando Ernst «Putzi» Hanfstaengl, uno de los amigos íntimos de Hitler, le instó a que abandonara el «feo» bigote, Hitler respondió: «Si no es la moda ahora, lo será más adelante porque yo lo llevo.»
No funcionó del todo así, por supuesto. Hoy en día, cualquier arreglo de vello facial que se parezca mínimamente al bigote de Hitler es objeto de burla pública. Michael Jordan fue objeto de infinitas burlas por llevar un bigote estrecho en un anuncio de ropa interior Hanes. Con el tiempo, volvió a llevar un bigote más tradicional. Sin embargo, las burlas no han disuadido al hombre fuerte de Zimbabue, Robert Mugabe. Lleva su bigote sin vergüenza, y se ha referido a sí mismo como «el Hitler de nuestro tiempo».
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