Este Ravioli de langosta con salsa de crema de azafrán es un plato para impresionar, por no decir que suena elegante. Pero, por favor, no te sientas intimidado y te desvíes. Es más fácil de lo que crees y estará listo en menos de 30 minutos. La buena noticia es que tenemos un atajo que es el Ravioli de Langosta comprado en la tienda de Trader Joe’s. Mmmm… y una mejor noticia, ¡eran $3.99 el paquete! Nos gastamos alrededor de 40 dólares por toda esta comida casera para 4 personas, lo que es mucho más barato que comer fuera. Cha-ching!
Para la salsa, haremos una salsa de crema de azafrán, que es súper fácil con sólo unos pocos ingredientes: azafrán, chalotas, mantequilla, ajo, limón, cebollino, crema de leche, vino blanco, sal y pimienta. Una vez que aprendas a hacer esta salsa, puedes improvisar y utilizarla en otras cosas como vieiras o pescados sellados, como la lubina.
La clave de la suntuosidad de esta salsa es el azafrán, la reina de todas las especias. Dato curioso sobre el azafrán, son los estigmas amarillos secos de una pequeña flor de azafrán púrpura. Cada flor proporciona sólo tres estigmas, que deben ser cuidadosamente recogidos a mano y luego secados, un proceso extremadamente laborioso. Se necesitan 225.000 estigmas para obtener una libra de azafrán, lo que convierte al azafrán en la especia más cara del mundo. Cuando se utiliza el azafrán, un poco da para mucho. Yo suelo usar ½ o 1 cucharadita para toda la comida. Me encanta ver cómo el color dorado rojizo se extiende en la salsa una vez que se calienta y se convierte en el color amarillo más hermoso.
¡Cocinemos algo de comida!
Hierve agua en una sartén u olla mediana, para cocinar los raviolis.
Mientras esperas a que el agua hierva, empieza a hacer la salsa de crema de azafrán.
Derrite la mantequilla a fuego medio, en una sartén profunda. A mí me gusta usar mi sartén Le Creuset Braiser.
Añade las chalotas picadas y cocínalas hasta que estén blandas.
Añadir el ajo picado y el cebollino picado. Cocinar durante un minuto.
Añadir el vino, removiendo hasta que se evapore el alcohol, unos 2 minutos.
Añadir la nata espesa. Batir hasta que empiece a espesar. Unos 10 minutos.
Añadir el azafrán. Reduce el fuego a bajo.
Bate la salsa y cocina a fuego lento hasta que espese un poco más.
Añade zumo de limón, sal y pimienta al gusto. Apagar el fuego.
Añadir los raviolis al agua hirviendo. Cocer según el envase (4-6 minutos).
Echar los raviolis cocidos en la salsa, me gusta usar mi colador de araña para esta tarea. Revuelve para cubrir.
Transfiere a los platos de servir y sirve con más salsa. Adorna con más cebollino y sirve con un poco de vino. Disfrutar¡
Me gusta el vino blanco y ya que lo usamos en el plato, tiene sentido beber el resto.
Espero de verdad que probéis esta receta de Raviolis de langosta con salsa de azafrán y me contéis qué tal. La ficha de la receta y la caja de comentarios está más abajo.
- 2 paquetes de raviolis de langosta de Trader Joe’s
- 2 cucharadas de mantequilla
- 2 chalotas, picadas
- 1 cucharada de cebollino picado, más para decorar
- 1 diente de ajo, picado
- ½ taza de buen vino blanco seco
- 2 tazas (1 pinta) de nata espesa
- 1 cucharadita de azafrán
- ½ limón, exprimido
- sal
- pimienta
- Hervir agua en una sartén u olla mediana, para cocer los raviolis.Mientras esperas a que el agua hierva, empieza a preparar la salsa de crema de azafrán.
- Funde la mantequilla a fuego medio, en una sartén profunda. Añadir las chalotas picadas y cocinar hasta que estén blandas.
- Añadir el ajo picado y el cebollino picado. Cocinar durante un minuto.
- Añadir el vino, removiendo hasta que se evapore el alcohol, unos 2 minutos.
- Añadir la nata espesa. Batir hasta que empiece a espesar. Unos 10 minutos.
- Añadir el azafrán. Reducir el fuego a bajo. Batir la salsa y cocer a fuego lento hasta que espese un poco más.
- Añadir zumo de limón, sal y pimienta al gusto. Apagar el fuego.
- Añadir los raviolis en el agua hirviendo. Cocer según el paquete (4-6 minutos).
- Echar los raviolis cocidos en la salsa, remover para cubrirlos.Pasar a los platos de servir y cubrir con más salsa. Adornar con más cebollino.